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Corvara es el corazón de la Alta Badia, la zona en la que se ubican varias estaciones del mejor dominio esquiable que se puede encontrar en los Dolomitas italianos.
Perteneciente al dominio esquiable de idéntico nombre – Alta Badia -, integrado en el conjunto de Dolomiti Superski, Corvara se encuentra situada estratégicamente en mitad del conocido recorrido de la Sella Ronda siendo uno de los mejores lugares para completar dicha excursión esquiando se entiende – sin demasiados aprietos de tiempo.
El pueblo se encuentra a 1.600 metros de altitud y es parte Alta Badia, conjunto de localidades de Ladinia, zona del Trentino-Alto Adige / Südtirol colindante con Austria, sorprendente por su belleza y la amabilidad de sus gentes.
Hay una parte muy importante de población austriaca lo que implica que haya mucha influencia de su cultura en el dí­a a dí­a de la estación.
Adicionalmente la cultura ladina, cuya lengua es el mayor exponente, está presente en el dí­a a dí­a de la zona.
Ofrece todo tipo de alojamientos, desde lujosos hoteles hasta apartamentos muy confortables así­ como una buena oferta culinaria y un más que decente apres-ski.
La región que nos ocupa está formada por distintos pequeños núcleos de población con buena conexión a través de diferentes remontes mecánicos.
El núcleo principal es Corvara pero hay otros pueblos que son una buena opción para alojarse e iniciar el recorrido por las montañas.
La Villa es el segundo pueblo en importancia y luego le siguen Colfosco, San Cassiano, Badia y La Val siendo los dos últimos poco recomendable para alojarse.
En lo referente al esquí­, las primeras sensaciones son realmente fantásticas. Alta Badia – el dominio esquiable al que pertenece Corvara e integrado en el mencionado Dolomiti Superski – cuenta con 65 remontes mecánicos, 130 kilómetros de pistas y una cantidad enorme de refugios donde hacer un descanso a lo largo de la jornada deportiva.
Los remontes mecánicos son bastante modernos y rara es la vez que hay alguno parado por algún problema técnico. De todos ellos, sólo hay 13 telesquí­es y casi todos ellos en zona de esquiadores principiantes. Este detalle permite hacerse una idea de la gran comodidad a la hora de hacer pequeñas paradas en los largos itinerarios programados.
Para esquiadores expertos no hay demasiados trayectos fuera de pistas pero cuenta dos pistas negras realmente espectaculares: La Gran Risa y Vallon.
La gran mayoría de la zona es muy adecuada para esquiadores con un nivel intermedio ya que destacan las pistas azules y alguna roja muy divertida.
También hay varias zonas para principiantes. Las pistas están bien comunicadas por la montaña pero, adicionalmente, cuentan con un eficiente servicio de autobuses que comunica las diferentes estaciones.
Es muy fácil identificar las distintas opciones de esquí en la Alta Badia. Las pistas más exigentes son las dos que comentábamos anteriormente así como alguna pequeña alternativa a las mismas algo más sencilla.
Esas pistas conducen a la parte del Teleférico Boe en Corvara y al pueblo de La Villa.
En ambos casos, el paisaje es muy bonito, entre arbolitos, con pistas anchas, pocas bañeras y bastante inclinación.
En cualquier caso, no se antojan peligrosas para esquiadores de nivel avanzado.
Por otra parte, en la parte media de la estación, a la que conduce el Teleférico de Col Alto, hay muchas alternativas de pistas azules, amplias y muy cómodas para cualquier tipo de esquiador.
Pero la gran ventaja de esta zona es la conexión con el maravilloso itinerario de la Sella Ronda, el cual recorre varias de las estaciones integradas en el forfait de Dolomiti Superski.
Aunque ya hablaremos de él con más detenimiento en nuestro próximo artículo de los Dolomitas, dejamos caer que se trata de un recorrido de más de 40 kilómetros, que cruza valle tras valle, pasa por el Pordoi, Canazei, Val Gardena, Selva y regresa a Corvara a través de Colfosco.
Una auténtica maravilla para los fanáticos del deporte blanco. Dura un mínimo de 5 horas y no hay obligación de repetir pista.
Aunque se puede hacer en los dos sentidos, es mejor seguir el sentido de las agujas del reloj a la hora de planificar la excursión (señales naranjas).
Quizás la única pega de algún pueblo de Alta Badia es que iniciar el recorrido desde La Villa o San Cassiano provoca un inicio algo más lento y repetitivo, algo que no sucede si lo comenzamos desde Corvara o Colfosco.
En mitad de las pistas hay muchas alternativas para comer algo o hacer un descanso a lo largo del día.
No merece mucho la pena destacar ninguno ya que son todos similares en calidad, variedad y servicio.
Destacamos para las comidas sus platos a base de todo tipo de salchichas, hamburguesas y huevos preparados de todas las maneras acompañados de speck, el embutido estrella de la zona.
Huevos fritos con speck y patatas fritas en el Refugio Salei - Paso del Sella - Canazei
Aunque es cierto que Moritzino, en Piz la Ila, al comienzo de la pista de La Gran Risa, merece ser visitado por todo el mundo tanto por su divertido ambiente durante todo el como por la originalidad de su puesta en escena.
De todos modos el ambiente, la música y los servicios de los refugios en la montaña son garantía de una parada más que divertida como se puede ver en este vídeo.
A pesar de ser un pequeño pueblo de montaña, cuenta con una amplia oferta hotelera, teniendo algún alojamiento con un nivel de calidad muy por encima de otros lugares que hemos visitado en Europa.
No es que destaque ni Corvara ni toda la zona dolomí­tica por su marcha nocturna, excepcón hecha de Cortina d´Ampezzo, pero sí­ ofrece unas buenas alternativas tanto en apres-ski, en pistas o en el propio pueblo, así­ como algún que otro lugar donde tomar una copa ya cuando cae la noche.